Ante el riesgo que supone la propagación del virus COVID-19 en
Argentina, para CAME, el Sector Comercial y la FCCA, la preservación de la
salud y la vida es prioridad absoluta tanto en nuestros ámbitos personales como
en los lugares de trabajo (comercios, oficinas, entidades, etc.) Este escenario
social y comercial inédito exige que actuemos con responsabilidad, compromiso y
solidaridad.
Cuidados especiales
Si trabajamos en un comercio y/o somos responsables de un local, existen varias medidas que debemos aplicar:
- Instruir al personal con las normas anunciadas por las autoridades.
- Alcohol en gel al alcance de clientes y personal.
- Mantener un metro de distancia entre las personas.
- Limpiar las superficies que tocan los clientes las veces que sea posible.
- No saludar con manos ni besos entre compañeros y clientes.
- No compartir botellas ni mate.
- Restringir el ingreso de clientes de acuerdo a la superficie.
- Atender por tandas para evitar aglomeraciones.
- Ofrecer la posibilidad de venta con envÃos a domicilio.
-
Privilegiar
los medios de pago electrónicos.
DesafÃos y nuevas herramientas
Está claro que el principal foco de estas acciones debe ser el cuidado
de la salud y evitar que el virus incremente su circulación. Pero los dos
últimos Ãtems, además, se inscriben entre los desafÃos que el comercio
tradicional afronta ante la realidad que hoy viven las comunidades de las que
forma parte en cada ciudad argentina.
En este sentido, el foco pasa por adaptar la atención al cliente a las
medidas preventivas. Por eso urge recurrir a herramientas tecnológicas que se
posicionan como un recurso fundamental con el fin de permanecer disponibles
para los consumidores.
Sus prestaciones contribuyen a lograr el objetivo de seguir brindando
servicios y mantener la capacidad operativa de los establecimientos, al mismo
tiempo que se cumple con las disposiciones oficiales.
Ya se siente la menor cantidad de gente en la calle y en los paseos comerciales. Ante esta situación, es clave apoyarse en estrategias digitales para facilitar el contacto y las consultas de los clientes de manera virtual, hacer envÃos de pedidos a domicilio y habilitar la opción de retirar compras de manera ágil y rápida. Si el comercio no cuenta con un sitio web, marketplace o plataforma de venta electrónica, se puede crear una cuenta de Instagram/Facebook para que los clientes se contacten y elijan productos allà (para luego enviar a domicilio o que los retiren en el local).
Estas herramientas son parte del proceso de transformación digital del
comercio que, en el contexto actual, debe acelerarse. No sólo favorecen la
actividad del sector: también contribuyen a cumplir con las medidas anunciadas para
evitar la propagación del coronavirus.
Hoy, más que nunca, debemos ser solidarios y responsables para preservar la salud de las personas. E innovadores para mantener de pie a nuestros comercios.