El diseño del comercio enamora al cliente
<div align="justify">El plan comercial de un negocio define objetivos y el perfil del cliente al que apuntan las estrategias de venta. A través de ellas, se debe generar una conexión que despierte emociones y enamore al consumidor. Y esa instancia requiere inviertir en el diseño de la tienda.<br><br>Muchos comerciantes hayan centrado una gran parte de sus esfuerzos en internet y el comercio electrónico.<strong> </strong>Pero no debemos descuidar la importancia de la tienda física. El buen diseño es una inversión. <br><br>Y el aumento de ventas tras una inversión en diseño bien planteada es un hecho. Esto abarca una nueva identidad corporativa, vidrieras más profesionales, una reforma, un nuevo planteamiento de la iluminación, etc. La clavede cada proyecto es estar basado en el conocimiento del cliente.<br><br><u>La identidad de marca en el comercio</u><br>Antes de comenzar con el diseño hay que pensar en la marca. ¿A qué tipo de clientes se dirige? ¿Qué les aporta? ¿Cuáles son los sus valores y cómo se van a transmitir a través del diseño? En definitiva, ¿cuál es la estrategia de negocio? Para concebir una identidad corporativa, la estrategia debe ser clara, además de saber cómo transmitirla.<br><br>No se trata sólo de diseñar un logotipo. La identidad debe estar presente en toda la tienda: el rótulo, las bolsas, las etiquetas, el papel de envolver, el packaging, la señalización interior. Y por supuesto, también en internet: perfiles de redes sociales, publicaciones, sitio web.<br><br><u>Diseñar el exterior</u><br>Una tienda física es un negocio que depende en gran medida de una buena ubicación y de su presencia exterior. No se puede diseñar el exterior sin tener en cuenta el interior. Pero la clave de un buen diseño exterior en el comercio es convertir la fachada en una invitación a entrar. ¿Cómo hacer un buen diseño del exterior de la tienda?<strong></strong><br><strong></strong><br><strong></strong>El interior: la ubicación de&nbsp;la puerta en la fachada estará condicionada no sólo por el interior, sino también por la circulación de personas&nbsp;por las aceras, desniveles de la calle o visibilidad desde ciertos puntos estratégicos.<strong></strong><br><strong></strong><br><strong></strong>Acceso cómodo: la accesibilidad toma mayor importancia si los clientes son madres o padres con carritos o sillitas de niños. O personas con movilidad reducida.<br><br>El rótulo: bien visible. No existe un rótulo ideal, sólo el que mejor se adapta a la calle y a la fachada: si es una calle ancha o estrecha, si estacionan autos o no, si el sol incide más o menos horas, la normativa municipal<br><br>La vidriera: al igual que con el rótulo, no existe una forma de vidriera ideal. ¿Cerrada o abierta? Las cerradas permiten un mejor aprovechamiento del interior y son más vistosos. Los abiertos sin embargo pueden ayudar a generar confianza a los clientes para que pierdan el miedo a entrar.<br><br><u>El diseño interior</u><br>Ahora más que nunca un buen diseño interior es clave para cualquier comercio. ¿Por qué? Algunos clientes se han fugado para comprar en internet. Esto quiere decir hay que utilizar el medio digital para llevar al cliente hacia la tienda.<br><br>No es solo cuestión de tener una tienda bonita, sino de crear interiores comerciales que inviten a comprar y a vivir experiencias. Ahora que ha visto el exterior, tu cliente ya tiene una idea de lo que va a encontrar. Para crear un interior comercial que venda, tenemos en cuenta:<br><br>Los clientes<strong>:</strong> ¿Para quién es la tienda? Definir el público objetivo es&nbsp;primordial para acertar con el diseño. No guiarse sólo por criterios demográficos, sino también por lo que les preocupa o les podría sorprender a los clientes potenciales ¿Tienen prisa cuando compran? ¿Vienen solos o en grupo? ¿Esperan ser atendidos o les gusta mirar y decidir por su cuenta.<br><br>La marca: un buen diseño de interior en el comercio está concebido para que se respire la marca en cada rincón. En este área es imprescindible la colaboración entre el diseñador gráfico y el interiorista.<br><br>El local: la forma y la arquitectura del local condiciona el diseño. Eso si, cada metro cuadrado cuenta y un buen proyecto tendrá en cuenta la circulación de clientes, para aprovechar al máximo toda la superficie.<br><br>La comunicación: ¿Qué cuenta la tienda? ¿Qué se siente al entrar?&nbsp;El interior del comercio es un conjunto de mensajes pensados para el cliente potencial, que le guían, le entretienen, le invitan a interactuar… Además de lo visual, podemos trabajar con <a href="http://doctora-retail.com/2013/03/25/despierta-los-sentidos-de-tus-clientes/">todos los sentidos</a>: ¿a qué huele la tienda? ¿se pueden tocar los productos? ¿cómo suena la tienda? ¿se puede probar?<br><br>Los productos: el diseño del interior de un comercio también debe pensarse para el producto. Para esto es necesario un buen <a href="http://doctora-retail.com/2016/04/25/marketing-punto-venta-para-tu-tienda/">plan de implantación</a> y que el surtido esté dispuesto de forma óptima para vender más y mejor.<br><br><u>¿Cuánto invertir en diseño?</u><br>No hay una cifra, todo depende del comercio, del rubro, del local. Al plantear una inversión en diseño, se debe hacer lo mismo que con cualquier otra: planificar cómo repercutirá en el aumento de los beneficios y cuánto tiempo se necesitará para amortizar esta inversión.<br><br>&nbsp;<strong></strong></div>
21 | FEB | 2017
Fachada de una pescadería parisina.
El plan comercial de un negocio define objetivos y el perfil del cliente al que apuntan las estrategias de venta. A través de ellas, se debe generar una conexión que despierte emociones y enamore al consumidor. Y esa instancia requiere inviertir en el diseño de la tienda.

Muchos comerciantes hayan centrado una gran parte de sus esfuerzos en internet y el comercio electrónico. Pero no debemos descuidar la importancia de la tienda física. El buen diseño es una inversión.

Y el aumento de ventas tras una inversión en diseño bien planteada es un hecho. Esto abarca una nueva identidad corporativa, vidrieras más profesionales, una reforma, un nuevo planteamiento de la iluminación, etc. La clavede cada proyecto es estar basado en el conocimiento del cliente.

La identidad de marca en el comercio
Antes de comenzar con el diseño hay que pensar en la marca. ¿A qué tipo de clientes se dirige? ¿Qué les aporta? ¿Cuáles son los sus valores y cómo se van a transmitir a través del diseño? En definitiva, ¿cuál es la estrategia de negocio? Para concebir una identidad corporativa, la estrategia debe ser clara, además de saber cómo transmitirla.

No se trata sólo de diseñar un logotipo. La identidad debe estar presente en toda la tienda: el rótulo, las bolsas, las etiquetas, el papel de envolver, el packaging, la señalización interior. Y por supuesto, también en internet: perfiles de redes sociales, publicaciones, sitio web.

Diseñar el exterior
Una tienda física es un negocio que depende en gran medida de una buena ubicación y de su presencia exterior. No se puede diseñar el exterior sin tener en cuenta el interior. Pero la clave de un buen diseño exterior en el comercio es convertir la fachada en una invitación a entrar. ¿Cómo hacer un buen diseño del exterior de la tienda?

El interior: la ubicación de la puerta en la fachada estará condicionada no sólo por el interior, sino también por la circulación de personas por las aceras, desniveles de la calle o visibilidad desde ciertos puntos estratégicos.

Acceso cómodo: la accesibilidad toma mayor importancia si los clientes son madres o padres con carritos o sillitas de niños. O personas con movilidad reducida.

El rótulo: bien visible. No existe un rótulo ideal, sólo el que mejor se adapta a la calle y a la fachada: si es una calle ancha o estrecha, si estacionan autos o no, si el sol incide más o menos horas, la normativa municipal

La vidriera: al igual que con el rótulo, no existe una forma de vidriera ideal. ¿Cerrada o abierta? Las cerradas permiten un mejor aprovechamiento del interior y son más vistosos. Los abiertos sin embargo pueden ayudar a generar confianza a los clientes para que pierdan el miedo a entrar.

El diseño interior
Ahora más que nunca un buen diseño interior es clave para cualquier comercio. ¿Por qué? Algunos clientes se han fugado para comprar en internet. Esto quiere decir hay que utilizar el medio digital para llevar al cliente hacia la tienda.

No es solo cuestión de tener una tienda bonita, sino de crear interiores comerciales que inviten a comprar y a vivir experiencias. Ahora que ha visto el exterior, tu cliente ya tiene una idea de lo que va a encontrar. Para crear un interior comercial que venda, tenemos en cuenta:

Los clientes: ¿Para quién es la tienda? Definir el público objetivo es primordial para acertar con el diseño. No guiarse sólo por criterios demográficos, sino también por lo que les preocupa o les podría sorprender a los clientes potenciales ¿Tienen prisa cuando compran? ¿Vienen solos o en grupo? ¿Esperan ser atendidos o les gusta mirar y decidir por su cuenta.

La marca: un buen diseño de interior en el comercio está concebido para que se respire la marca en cada rincón. En este área es imprescindible la colaboración entre el diseñador gráfico y el interiorista.

El local: la forma y la arquitectura del local condiciona el diseño. Eso si, cada metro cuadrado cuenta y un buen proyecto tendrá en cuenta la circulación de clientes, para aprovechar al máximo toda la superficie.

La comunicación: ¿Qué cuenta la tienda? ¿Qué se siente al entrar? El interior del comercio es un conjunto de mensajes pensados para el cliente potencial, que le guían, le entretienen, le invitan a interactuar… Además de lo visual, podemos trabajar con todos los sentidos: ¿a qué huele la tienda? ¿se pueden tocar los productos? ¿cómo suena la tienda? ¿se puede probar?

Los productos: el diseño del interior de un comercio también debe pensarse para el producto. Para esto es necesario un buen plan de implantación y que el surtido esté dispuesto de forma óptima para vender más y mejor.

¿Cuánto invertir en diseño?
No hay una cifra, todo depende del comercio, del rubro, del local. Al plantear una inversión en diseño, se debe hacer lo mismo que con cualquier otra: planificar cómo repercutirá en el aumento de los beneficios y cuánto tiempo se necesitará para amortizar esta inversión.