Cómo fidelizar clientes
<p style="text-align: justify;" align="justify">Si bien el comercio minorista siempre apunta a adquirir nuevos clientes, no debe descuidar a los que ya logró captar a través de su trayectoria. Por eso hay que trabajar en ganarse su fidelidad, con el plus de convertirlos en voceros del negocios.<strong></strong></p><div align="justify">En primer lugar, es importante contar con una base de datos de clientes actualizada. Es fundamental para formular estrategias válidas de orientación al cliente. Una opción es acceder a un sistema de fidelización de clientes o recurrir a soluciones informáticas a cargo de algún proveedor.<br><br>Hay que empezar por lo básico: nombre y apellidos, dónde viven, edad, sexo. Y por supuesto datos de contacto para mantenerlos informados de novedades, ofertas, eventos, etc. <br><br>Una buena idea es premiar a quienes proveen sus datos. Puede ser un descuento en su próxima compra, entrar en el sorteo de un regalo, puntos por cada compra a canjear por regalos, etc.<br><br>Clasificación de clientes por grupos: los ocasionales (compran muy poco), los “normales” (compran de vez en cuando), los VIP (siempre compran en la tienda). <br><br>Las acciones deben concentrarse en agradar a estos últimos con información personalizada de cada campaña, premios por recomendar la tienda a otros clientes, o averiguando qué tipo de promociones prefieren.<br><br>El segundo desafío será que los “ocasionales” y los “normales” visiten más a menudo la tienda y compren más. </div><p style="text-align: justify;" align="justify">Es clave medir periódicamente la satisfacción de los clientes, algo que se puede hacer de manera sencilla gracias a la base de datos. <br></p>
25 | MAY | 2017

Si bien el comercio minorista siempre apunta a adquirir nuevos clientes, no debe descuidar a los que ya logró captar a través de su trayectoria. Por eso hay que trabajar en ganarse su fidelidad, con el plus de convertirlos en voceros del negocios.

En primer lugar, es importante contar con una base de datos de clientes actualizada. Es fundamental para formular estrategias válidas de orientación al cliente. Una opción es acceder a un sistema de fidelización de clientes o recurrir a soluciones informáticas a cargo de algún proveedor.

Hay que empezar por lo básico: nombre y apellidos, dónde viven, edad, sexo. Y por supuesto datos de contacto para mantenerlos informados de novedades, ofertas, eventos, etc.

Una buena idea es premiar a quienes proveen sus datos. Puede ser un descuento en su próxima compra, entrar en el sorteo de un regalo, puntos por cada compra a canjear por regalos, etc.

Clasificación de clientes por grupos: los ocasionales (compran muy poco), los “normales” (compran de vez en cuando), los VIP (siempre compran en la tienda).

Las acciones deben concentrarse en agradar a estos últimos con información personalizada de cada campaña, premios por recomendar la tienda a otros clientes, o averiguando qué tipo de promociones prefieren.

El segundo desafío será que los “ocasionales” y los “normales” visiten más a menudo la tienda y compren más.

Es clave medir periódicamente la satisfacción de los clientes, algo que se puede hacer de manera sencilla gracias a la base de datos.